Cuidándome de lo que recibo del exterior

En estos días estamos viviendo, la mayoría de nosotr@s desde la distancia, la erupción del volcán de La Palma y después de varios días donde casi se relata al minuto la evolución de la erupción y sobre todo la situación angustiosa de las personas que están viviendo esta tragedia en primera persona, me ha latido fuerte compartir mi postura como practicante de la Atención Plena… disculpen de antemano limitación que impone un compartir por este medio.

Reflexiono en estos días, con esta nueva noticia, nuestra tendencia adictiva como sociedad, alimentada por los medios, a conectarnos con noticias que nutren la contracción interna, ya sea esta contracción en forma de miedo, enfado, angustia, crítica, dolor, impotencia, etc.

Personalmente me gusta estar informado de lo que pasa en mi entorno y en el mundo pero como practicante también he aprendido que tengo que ser muy cuidadoso con la cantidad de información a la que me expongo. He comprobado en mi mismo que cuando estoy expuesto al “bombardeo mediático” o a las conversaciones “contaminantes”con otras personas sin estar en contacto conmigo me empiezo a sentir mal internamente. Y en este punto me pregunto ¿Qué puedo aportar de beneficioso a esta situación o a las personas que están sufriendo con este sentir interno de malestar? Mi respuesta siempre ha sido clara: Nada. Lo único que puede hacer que yo tenga un estado interno contraído es perjudicar a otros seres y a la situación a parte de a mi mismo.

Como practicante de la Atención Plena me vienen tres ideas principales para poner en práctica en esta situación que estamos viviendo o para cualquier otra calamidad que venga en el futuro… porque seguirán viniendo inevitablemente.

Para y siente si lo que estás dejando entrar está siendo beneficioso o lo contrario. Si lo que estoy escuchando o viendo no me está aportando nada beneficioso sino más bien lo contrario ¿cuál es el sentido de seguir alimentándolo?

Si no puedes hacer nada para mejorar la situación por lo menos no la empeores Puedo donar dinero, ropa o cualquier cosa que soliciten las autoridades o personas afectadas. Si no puedo contribuir de esta manera e incluso si puedo, hay algo muy valioso que puedo hacer como practicante; la práctica del amor bondadoso o Mettha Bhavana con la que compartimos nuestros mejores deseos desde un corazón abierto y bondadoso. Independientemente de que creamos o no en la oración o el poder de las bendiciones esta práctica nos llevará a la paz interna, sin duda, una de las mejores formas de contribuir al mundo.

¿Puedes ver lo doloroso sin dejar de apreciar lo bello? En esta situación del volcán de La Palma donde tantas familias se han visto afectadas de forma tan dramática ¿puedo mantener la mirada de asombro y apreciar la belleza y la fuerza descomunal de la naturaleza sin rechazarla?

Que las familias afectadas de La Palma puedan encontrar todos los medios y facilidades para la reconstrucción de sus vidas a nivel externo e interno.

Que la naturaleza sea benévola y afecte lo menos posible a todos los seres de La Palma.

Un abrazo

Damián Pineda

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